miércoles, 12 de diciembre de 1990
martes, 25 de octubre de 1988
martes, 24 de diciembre de 1985
NAVIDAD
Last Christmas, I gave you my heart
But the very next day, You gave it away
This year, to save me from tears
I'll give it to someone special
Last Christmas, I gave you my heart
But the very next day, You gave it away
This year, to save me from tears
I'll give it to someone special
Once bitten and twice shy
I keep my distance but you still catch my eye
Tell me baby do you recognise me?
Well it's been a year, it doesn't surprise me
(Happy Christmas!) I wrapped it up and sent it
With a note saying "I Love You" I meant it
Now I know what a fool I've been
But if you kissed me now I know you'd fool me again
A crowded room, friends with tired eyes
I'm hiding from you and your soul of ice
My God I thought you were someone to rely on
Me? I guess I was a shoulder to cry on
A face on a lover with a fire in his heart
A man undercover but you tore me apart
Oooh Oooh
Now I've found a real love you'll never fool me again
Chorus
A face on a lover with a fire in his heart
(Gave you my heart)
A man undercover but you tore me apart
Next year
I'll give it to someone, I'll give it to someone special
special
someone
someone
I'll give it to someone, I'll give it to someone special
who'll give me something in return
I'll give it to someone
hold my heart and watch it burn
I'll give it to someone, I'll give it to someone special
I've got you here to stay
I can love you for a day
I thought you were someone special
gave you my heart
I'll give it to someone, I'll give it to someone
last christmas I gave you my heart
you gave it away
I'll give it to someone, I'll give it to someone
miércoles, 2 de octubre de 1985
LA REGENTA
LA REGENTA
Leopoldo Alas "Clarín"
2 de Octubre de 1877
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D. Fermín otea Vetusta desde la torre de la catedral
Barrio de La Encimada: Aristocracia
Barrio del Campo del Sol: Proletariado
Barrio de La Colonia: Burguesía de indianos
1.- Bismarck: Unos 14 años. “Un pillo ilustre de Vetusta”, es cochero pero también suple a Celedonio, el monaguillo-sacristán.
2.- Celedonio: 13 años.Monaguillo-sacristán; homosexual; repugnante.
3.- Magistral (D. Fermín de Pas): 35 años
4.- D. Saturnino Bermúdez: 33 años. Descendiente del rey Bermudo. Estuvo enamorado de la Regenta, y ahora bebe los vientos por Obdulita Fandiño. Historiador ridículo de Vetusta.
5.- D. Custodio: Beneficiado; enemigo acérrimo del Magistral; afeminado; utiliza a Celestina, la hija de D. Santos Barinaga, que bebe los vientos por él.
6.- El Palomo: Especie de portero de la Catedral. Llamado el “perrero”, porque se encarga de echar a los canes vagabundos que se cuelan en el recinto sagrado,
7.- La Regenta (Ana Ozores): 27 años.
D. Fermín, Vicario General de la Diócesis, baja de la torre. Se cruza con D. Custodio, luego con varias beatas. Ve a D. Saturnino, que ejerce de cicerone para un grupo formado por dos señoras y un caballero: Obdulia Fandiño y el matrimonio Infanzón.
8.- Obdulia Fandiño: viuda de Pomares: 37 años. Culona, pechugona, ostentosa, ordinaria, hortera, ligera de cascos. Se muere por seducir al Magistral, y no cesa de ponerle “ojitos”.
9.- Los Infanzón: matrimonio indiano, amigos de la Fandiño. Residen en Palomares (Avilés o Gijón), están de visita en Vetusta.
10.- D. Cayetano Ripamilán: 76 años. Bilbilitano. Canónigo Arcipreste. Amigo de D. Víctor Quintanar.
11.- Restituto Mourelo “Glocester”: Arcediano; enemigo mortal del Magistral; tercero en la jerarquía eclesiástica (tras el Obispo y D. Cayetano)
12.- Petra: 26 años. Rubia azafranada, rubia lúbrica. Criada de los Quintanar. Figura clave.
13.- D. Víctor Quintanar: 50 y tantos (que parecen sesenta y tantos). Ex-Regente. Marido de Ana Ozores.
14.- Tomás Crespo “Frígilis”: Amigo del alma de D. Víctor. Logró que éste matrimoniara con Anita Ozores. Grave error. Claro que la otra opción, la de las tías de Ana, era D. Frutos Redondo, rico indiano y grandísimo patán.
15.- D. Carlos Ozores (1814 – 1868): padre de Ana. Idealista, revolucionario. Morirá de repente en la cama mientras dormía.
16.- Madre de Ana: Humilde modistilla italiana, guapísima y honrada. Murió en el parto.
17.- Dª Camila “la española-inglesa”: El aya siniestra que D. Carlos tomó para Anita. Mujer cruel, intrigante, lasciva, pretenderá -sin éxito- trajinarse a D. Carlos.
18.- Iriarte: Amigo de D. Carlos. Le venderá a éste su casa de campo cerca del mar para que vivan allí Anita y Dª Camila, todo en aras de la delicada salud de la niña. También irá Iriarte, que se convierte en amante de Camila y en repugnante acosador de la niña. Ésta lo denomina “el hombre”, recuerdo vago e inquietante de su infancia.
Cuando son presentados Dª Ana Ozores y D. Víctor Quintanar, ella tiene 19 años y el 40 y tantos.
Las tías quieren casarla con:
19.- D. Frutos Redondo: Indiano repleto de dinero y estupidez a partes iguales.
20.- Dª Anuncia y
21.- Dª Águeda, hermanas de D. Carlos, se hacen cargo de Anita y velan por lograrle un buen partido.
Al final, Ana se decanta por D. Víctor, el recomendado de Ripamilán y de Frígilis (con quien Ana había trabado una sincera amistad).
En ese momento ella tiene 19 años y Quintanar cuarenta y pocos. La boda fue en 1869.
Parten en diligencia a Granada, donde él tomará posesión de la magistratura de la Audiencia.
CAPÍTULO VI: El Casino
22.- D. Pompeyo Guimarán, el filósofo ateo.
23.- Basilio Méndez, empleado del ayuntamiento y tahúr desganado, sólo juega por aliviar su magro sueldo.
24.- D. Matías, procurador, también tahúr. Éste y D. Basilio despluman al infeliz
25.- Vinculete
En la pared de la biblioteca del Casino hay un mapa de Rusia y Turquía, suponemos que por la guerra (comenzada el 24 Abril de 1877 acabará el 3 de Marzo de 1878)
26.- Trifón Cármenes, joven poeta enamorado de la Regenta. Es el poeta de Vetusta.
27.- D. Amadeo Bedoya, capitán de artillería, tiene la “llave perdida” de la estantería baja.
Pág 344.- Se nos cuenta que Pepe Ronzal fue diputado provincial por Pernueces: «Desde el año de la Restauración en adelante pasaba ya Ronzal por hombre de iniciativa...»
Fue 1875 el año de la Restauración, cuando subió al trono Alfonso XII (en el mes de Enero)
Por tanto, la acción de la Regenta es posterior a esta fecha.
28.- Foja, ex-alcalde liberal, usurero y enemigo del Magistral.
Pág 357.- Dice Foja, refiriéndose a D. Fermín: «Se ha hecho rico en cinco o seis años que lleva de Provisor». Por tanto, no lleva más de seis años en Vetusta. Sabemos que el 18 de Julio de 1870, el Magistral estuvo en Roma defendiendo la infalibilidad pontificia. Después estuvo en Madrid, y de allí pasó a Vetusta. Así pues, la fecha del comienzo de la novela no puede ser anterior a 1876.
Pág 358.- Ítem más, sigue diciendo Foja: «Y el día que haya en España un gobierno medio liberal...». El primer Gobierno Liberal se constituyó el 10 de Febrero de 1881, siendo su Primer Ministro D. Práxedes Mateo Sagasta.
Así pues la acción se desarrolla no antes de 1876 y no más tarde de 1881, siendo la fecha más lógica la de 1877.
29.- Marqués de Vegallana, jefe del partido más reaccionario entre los dinásticos. Se dedica a voltear aldeanas en invierno, a las que casa con mostrencos para solucionar el problema de los hijos ilegítimos.
30.- Dª Rufina Robledo, marquesa de Vegallana, tiene a su esposo por un grandísimo majadero, condición, no obstante, universal en todos los maridos.
31.- Pedro, 40 años, cocinero de los Vegallana.
32.- Colás, pinche
2-OCTUBRE-1877.- Comienza la novela; el Magistral otea vetusta desde el campanario de la Catedral. Habla con Ripamilán, éste quiere pasarle a la Regenta como hija de confesión. La encuentran en el Espolón. Cita para confesar al día siguiente.
3-OCTUBRE-1877.- Casino, murmuraciones, Mesía y Paquito Vegallana van a casa de éste pensando que allí estarán Visita y la Regenta, y en efecto, Visita no falla, pero su acompañante no es Anita sino Obulia Fandiño, Vda. De Pomares. Charla en el balcón de Mesía y Visita, ella le habla de las perfecciones anatómicas de la Regenta, con el exclusivo fin de ponerlo cachondo, objetivo que consigue plenamente.
En estas que Ana viene por la calle acompañada de Petra. Visita la llama, Ana confirma que viene de confesar. Luego se va con Petra a las afueras, a vagar por la campiña. El Sol se pone, la Regenta tiene miedo, llama a Petra que llega corriendo, venía de tontear con su primo que tiene un molino allí al lado. Regresan por el bulevar donde pasean los jóvenes proletarios, alegres, en jovial algazara. Genial retrato costumbrista de la clase trabajadora. Y, mira por dónde, coinciden con Paquito y Mesía, que también iban de paseo. Éste charla con la Regenta. Don Álvaro no tiene fe de ningún tipo «ni bendita la falta».
Paquito se demora con Petra para dejar espacio a su amigo. Éste logra decirle a la Regenta de modo espontáneo, totalmente subconsciente: «¡Qué monísima!». A ella le sabe a Gloria el piropo que está claro le ha salido del corazón.
Llega Paquito con Petra diciendo que, luego, tienen todos teatro, dan “La Vida es Sueño”. Ana asegura que no irá, porque al día siguiente comulga (¿es domingo?). En efecto, no irá, a pesar de todos los ruegos de la marquesa y D. Víctor.
La Regenta está sola, llorando en el balcón, viendo los eucaliptos mecerse, como cuchicheando, «como diciéndose discretamente lo que pensaban de aquella loca, de aquella mujer sin madre, sin hijos, sin amor, que había jurado fidelidad eterna a un hombre que prefería un buen macho de perdiz a todas las caricias conyugales». Y es que Dios da pan al que no tiene dientes.
NOTA (pág. 459).- Dice la Regenta tras caer en la trampa de zorros inventado por su marido y Frígilis: «Y hacía tres años que ella vivía entre aquel par de sonámbulos, sin más relaciones íntimas».
Así pues, hace tres años que habitaba la singular villa de Vetusta. Recordemos que ella y D. Víctor habían vivido «en Granada, en Zaragoza, en Granada otra vez, y en Valladolid». O sea un año en cada sitio.
En Granada tuvo un atisbo de romance, preludio de lo que le ocurrirá en Vetusta. Un tal
33.- Mr. Brooke, se enamoró de ella y le regaló una piel de tigre (que ella tiene a los pies de la cama) cazado por sus criados en la India. En una carta, que Ana rasgó, Brooke le juraba ahorcarse en un árbol del Generalife. Pero, ya sabemos cómo son los hombres, acabó casándose con una gitana del Albaicín.
34.- Anselmo, criado de los Quintanar. Según Petra es «otro estúpido que jamás había a buscarla en el secreto de la noche»
4-OCTUBRE-1877.- El Magistral se levanta temprano, como es su costumbre, para estudiar, luego vendrán las ocupaciones sociales. Por otra parte se recuerda una discusión la tarde anterior en un corrillo de clérigos y seglares entre los que estaban Ripamilán, Foja y Santos Barinaga. Debatían sobre la simonía de D. Fermín.
En un momento, dice D. Cayetano (pág. 479): «Y estos son los liberales que quieren hacernos felices... y ahora rabian porque no les dejan decir esas picardías en los periódicos». Alude Ripamilán a la censura de prensa, instituida por los Reales Decretos de 30-Diciembre-1874 y de 28-Enero-1875. Por tanto la acción no es anterior a 1875.
35.- El “Chato” Campillo, organista de la catedral y chivato al servicio del Magistral.
36.- Teresina, 20 años, esbelta, bien formada, ojos grandes, negros, belleza griega. Doncella de D. Fermín, y también de su mamá, pero menos. Duerme cerca del despacho y la alcoba del señorito –exigencias de Dª Paula- por si éste necesita “cualquier” cosa. Ejem.
37.- Dª Paula Raíces, 60 años, madre del Magistral.
En ese día, 4 de Octubre, llega Petra temprano con una carta a casa del Magistral. «Se presentó como si fuese una desconocida», y es que en su día había intentado seducirlo; como también entra la madre, no tiene otra que leer la carta delante de ella. Obviamente Dª Paula se lo huele todo y se indigna. «La madre de D. Fermín creía en la omnipotencia de la mujer. Ella era un buen ejemplo» (¡GENIAL!)
38.- D. Francisco de Asís Carraspique, uno de los indivíduos má importantes de la Junta Carlista de Vetusta. Anda por los sesenta y está podrido de millones. Hombre muy religioso.
39.- Dª Lucía, esposa de Carraspique.
40.- Robustiano Somoza, primo de Dª Lucía, médico incompetente.
COMENSALES DEL BANQUETE DEL 4-OCTUBRE-1877
La primera parte de la Regenta termina con el capítulo XV, al cantar Pepe, el sereno, las doce de la noche del día 4 de Octubre de 1877.
D. Santos Barinaga ha estado plantado delante de la casa del Magistral, borracho como una cuba, acusando al Provisor de simoniaco y canalla mientras éste espiaba por una ventana abierta.
****
SEGUNDA PARTE
La SEGUNDA PARTE se inicia el 1 de Noviembre, festividad de Todos los Santos. La Regenta observa la taza vacía de café, la copa de anís y el cigarro a medio consumir apagado en el café derramado.
«Ella era también como aquel cigarro, una cosa que no había servido para uno y que ya no podía servir para otro»
NOTA.- pág 93: Dice Ana: «Aquellos ocho años vividos al lado de un hombre que ella creía vulgar»... por tanto la Regenta se casó a los 19 años.
Mientras está viendo “El Tenorio”, dice D. Víctor: «Bueno estaría que ahora que vamos a perder Cuba» (pág 103), clara alusión a la “Guerra Chiquita”, insurrección que tuvo lugar en la isla caribeña entre 1868 y 1878.
CAPÍTULO XVII: Escena del guante
El capítulo XVI ha sido el de la escena del Tenorio, el día 1 de noviembre. En el XVII estamos en el día siguiente, Difuntos: «Al oscurecer de aquel mismo día, que era el de Difuntos, Petra anunció a la Regenta, que paseaba en el parque, entre los eucaliptos de Frígilis, la visita del Sr. Magistral»
41.- Servanda, cocinera de los Quintanar; junto a Petra y Anselmo completa el servicio que tiene la casa.
CAPÍTULO XIX
(Pág 75).- En la primavera del año siguiente (MARZO-1878), la Regenta cae enferma. “La Primavera médica”, según el Dr. Somoza. Como no tiene la menor idea de lo que ocurre, envía al joven
42.- Dr. Benítez, que hace amistad con Quintanar, ambos comentan la “Guerra de Rusia”, luego es claro que estamos en 1878 (la guerra comenzó el 24 de Abril de 1877) o en 1878 (la guerra acabó el 3 de marzo de 1878, con el tratado de San Estéfano, aunque este tratado se modificó en el Congreso de Berlín, el 23 de julio de 1878).
43.- Juanito Reseco, el otro ateo de Vetusta, borracho como una cuba, en el banquete con que obsequian a D. Pompeyo le profetiza a éste que morirá dentro del seno de la Sta. Madre Iglesia. Amen dico vobis.
44.- Parcerisa, obrero de la fábrica de Vetusta, el venerable socialista de barba cana (como han de ser todos los sociatas que se precien), estaba con el grupo que apoyaba de boquilla a D. Santos Barinaga y odiaba a D. Fermín.
45.- “Vinagre”, o sea, D. Belisario Zumarri, el maestro más sanguinario de Vetusta. Todas las Semanas Santas va en procesión travestido de nazareno.
CAPÍTULO XXVI
Semana Santa de 1879. Es la conversión de D. Pompeyo y el espectáculo de Ana vestida de nazarena con sus pies descalzos. ¡El triunfo del Magistral!
CAPÍTULO XXVII
Comienza el último día de Mayo de 1879.
Ana y Quintanar están en el Vivero, la famosa propiedad de los Vegallana. Ana está recuperada y alegre. Ello es exigencia de Benítez, el joven médico sustituto del inútil de Somoza.
29 de Junio de 1879, día de S. Pedro.
Papelón del Magistral durante la tormenta. Patético.
CAPÍTULO XXVIII
D. Álvaro se declara a la Regenta.
28-Diciembre-1879.- D. Víctor descubre la traición
El Magistral es un cabrón que visita a D. Víctor para que asesine a Mesía.
D. Víctor muere el 31 de Diciembre de 1879 a las once de la mañana.
La Regenta queda sola. Únicamente Benítez y Frígilis la cuidan (y los criados Anselmo y Servanda). Ripamilán también hubiera querido visitarla, pero cayó enfermo y quedó postrado en cama durante dos años para luego morir (en 1882) demenciado pero alegre.
ESQUEMA DE LA ACCIÓN:
2-OCTUBRE-1877.- D. Fermín otea Vetusta desde la torre de la Catedral
4-OCTURBE-1877.- Banquete por la celebración de S. Francisco en casa de los Marqueses de Vegallana
NOVIEMBRE-1877.- Día de Difuntos. Representación del Tenorio, comienzan los primeros escarceos de D. Álvaro para lograr los favores de la Regenta.
MARZO-1878.- La Regenta en arrebato místico, el Magistral en sus glorias. Éste le escribe la carta.
JUNIO-1878.- Conspiración del Casino con D. Pompeyo Guimarán "el ateo" de Vetusta.
JULIO-1878.- Se va D. Álvaro. Celos de la Regenta.
SEPTIEMBRE-1878.- Vuelve Mesía y toda la Vetusta veraneante.
NOVIEMBRE-1878.- Entierro del pobre D. Santos Barinaga. El Magistral acorralado.
NAVIDAD-1878.- Misa del Gallo. Intiman más Mesía y Ana.
CARNAVAL-1879.- Anita baila con Mesía y se desmaya en sus brazos. El Magistral hundido.
MARTES de CARNAVAL-1879.- Ana se convence de que el Magistral la ama.
SEMANA SANTA-1879.- Muerte de D. Pompeyo en Miércoles Santo tras pedir confesión con D. Fermín. Espectáculo de Ana en la procesión de Viernes Santo. El Magistral triunfante.
31-MAYO-1879.- Ana, tras una nueva crisis, descansa en el Vivero. A lo largo del verano intima más y más con Mesía.
29-JUNIO-1879.- Es la festividad de S. Pedro, celebración, algazara. Escena y papelón de la tormenta.
11-NOVIEMBRE-1879.- Veranillo de S. Martín, ¡por fin Anita cae entre los brazos (y las piernas) de Mesía). Fecha emblemática donde se cumple el refrán de que "A todo cerdo le llega su San. Martín"
NAVIDAD-1879.- Traición de Petra.
28-DICIEMBRE-1879.- Día de los Inocentes: D. Víctor lo descubre todo.
31-DICIEMBRE-1879.- Duelo y muerte de Quintanar; expira a las once de la mañana.
OCTUBRE-1880.- Ana vuelve a la Catedral.
martes, 5 de marzo de 1985
domingo, 3 de marzo de 1985
EL ENCUENTRO
****
A toi, mon amour, mon doux, mon tendre, mon merveilleux amour, parce que, tu sais, de l'aube claire jusqu'à la fin du jour, je t'aime encore, tu sais, je t'aime...
****
Bien sûr, nous eûmes des orages
Vingt ans d'amour, c'est l'amour fol
Mille fois tu pris ton bagage
Mille fois je pris mon envol
Et chaque meuble se souvient
Dans cette chambre sans berceau
Des éclats des vieilles tempêtes
Plus rien ne ressemblait à rien
Tu avais perdu le goût de l'eau
Et moi celui de la conquête
Mais mon amour
Mon doux mon tendre mon merveilleux amour
De l'aube claire jusqu'à la fin du jour
Je t'aime encore tu sais je t'aime
Moi, je sais tous tes sortilèges
Tu sais tous mes envoûtements
Tu m'as gardé de pièges en pièges
Je t'ai perdue de temps en temps
Bien sûr tu pris quelques amants
Il fallait bien passer le temps
Il faut bien que le corps exulte
Finalement finalement
Il nous fallut bien du talent
Pour être vieux sans être adultes
Oh, mon amour
Mon doux mon tendre mon merveilleux amour
De l'aube claire jusqu'à la fin du jour
Je t'aime encore, tu sais, je t'aime
Et plus le temps nous fait cortège
Et plus le temps nous fait tourment
Mais n'est-ce pas le pire piège
Que vivre en paix pour des amants
Bien sûr tu pleures un peu moins tôt
Je me déchire un peu plus tard
Nous protégeons moins nos mystères
On laisse moins faire le hasard
On se méfie du fil de l'eau
Mais c'est toujours la tendre guerre
Oh, mon amour...
Mon doux mon tendre mon merveilleux amour
De l'aube claire jusqu'à la fin du jour
Je t'aime encore tu sais je t'aime
A toi, mon amour, mon doux, mon tendre, mon merveilleux amour, parce que, tu sais, de l'aube claire jusqu'à la fin du jour, je t'aime encore, tu sais, je t'aime...
****
Bien sûr, nous eûmes des orages
Vingt ans d'amour, c'est l'amour fol
Mille fois tu pris ton bagage
Mille fois je pris mon envol
Et chaque meuble se souvient
Dans cette chambre sans berceau
Des éclats des vieilles tempêtes
Plus rien ne ressemblait à rien
Tu avais perdu le goût de l'eau
Et moi celui de la conquête
Mais mon amour
Mon doux mon tendre mon merveilleux amour
De l'aube claire jusqu'à la fin du jour
Je t'aime encore tu sais je t'aime
Moi, je sais tous tes sortilèges
Tu sais tous mes envoûtements
Tu m'as gardé de pièges en pièges
Je t'ai perdue de temps en temps
Bien sûr tu pris quelques amants
Il fallait bien passer le temps
Il faut bien que le corps exulte
Finalement finalement
Il nous fallut bien du talent
Pour être vieux sans être adultes
Oh, mon amour
Mon doux mon tendre mon merveilleux amour
De l'aube claire jusqu'à la fin du jour
Je t'aime encore, tu sais, je t'aime
Et plus le temps nous fait cortège
Et plus le temps nous fait tourment
Mais n'est-ce pas le pire piège
Que vivre en paix pour des amants
Bien sûr tu pleures un peu moins tôt
Je me déchire un peu plus tard
Nous protégeons moins nos mystères
On laisse moins faire le hasard
On se méfie du fil de l'eau
Mais c'est toujours la tendre guerre
Oh, mon amour...
Mon doux mon tendre mon merveilleux amour
De l'aube claire jusqu'à la fin du jour
Je t'aime encore tu sais je t'aime
domingo, 27 de enero de 1985
RAYUELA
RAYUELA
Julio Cortázar
PRIMERA PARTE: "DEL LADO DE ALLÁ"
1.- (caps. 1-8) Romántica descripción del ir y venir de Horacio y la Maga por París, su extraño amor, su silenciosa relación.
"¿Encontraría a la Maga? Tantas veces me había bastado asomarme, viniendo por la rue de Seine, al arco que da al Quai de Conti, y apenas la luz de ceniza y olivo que flota sobre el río me dejaba distinguir las formas, ya su silueta delgada se inscribía en el Pont des Arts, a veces andando de un lado a otro, a veces detenida en el pretil de hierro, inclinada sobre el agua."
2.- (caps. 9-18) Audición nocturna de Jazz en casa de Ronald. El Club de la Serpiente al completo:
-RONALD (y Babs)
-BABS (y Ronald)
-PERICO ROMERO (cutre y fallido estereotipo del español, del "gallego" de chiste argentino).
-ETIENNE (pintor y amigo de Horacio)
-OSSIP GREGOROVIUS
-WANG (chino psicópata)
-HORACIO OLIVEIRA (cuarenta y cinco años)
-LUCÍA "La Maga" (y su hijito, Rocamadour, que en realidad se llama Carlos Francisco)
-GUY MONOD
Todos están borrachos, y la Maga se enrolla con Gregorovius. Ella les cuenta cómo a los trece años fue violada por el negro Ireneo.
Horacio tiene un ataque de celos, mal disimulado en un larguísimo y absurdo monólogo interior preñado de memeces. Es que el chico es un progre del carajo, y claro, lo de los celos es un resabio pequeño-burgués.
3.- (caps. 19-21) Oliveira se replantea seguir viviendo con la Maga.
"-Siempre me sospeché que acabarías acostándote con Ossip -dijo Oliveira.
-Rocamadour tiene fiebre -dijo la Maga.
Oliveira cebó otro mate"
Ella niega la acusación, cuando debería no darle explicaciones y mandarlo a tomar polsaco. Oliveira le dice que se va. En realidad él ya no la soporta, ni a ella ni al pequeño, siempre enfermo, siempre llorando, siempre oliendo a pis. Lo de Gregorovius es la coartada perfecta para su hipócrita conciencia, porque él sí puede tener dos amantes, como luego se verá.
Y como Oliveira en el fondo es un cobarde, decide quedarse (afuera llueve, hace frío, no tiene a donde ir...), eso sí, tras haberle montado la escena a la infeliz Lucía.
Por último, sale a dar una vuelta, quiere alejarse de la Maga por unas horas.
En el cáp. 21 cita a un tal Guy Trébert.
Fue este Trébert un psicópata que asesinó y descuartizó a una mujer y al que se logró detener gracias al retrato robot que publicó la revista sensacionalista "détective". La misma revista sacó en primera plana la resolución del caso el 29 de Mayo de 1959 (el canalla había sido arrestado nueve días antes). Fue un caso muy sonado en su día.
Horacio prosigue su huida. Errabundo, da vueltas en la madrugada Parisina.
4.- MORELLI y BERTHE TRÉPAT.
Horacio asiste al atropello de un anciano. Ve cómo se lo llevan al hospital. Medita sobre la soledad. Este hombre es el famoso novelista Morelli, personaje de ficción, alter ego de Cortázar (bueno todos los personajes -masculinos, of course- de esta novela son el alter ego de Cortázar, y todos son pocos para semejante ego). Morelli aparece, sobre todo, en la tercera parte ("DE OTROS LADOS (capítulos prescindibles)"), con capítulos repletos de citas, pensamientos y escritos de este genio al que admira todo el Club de la Serpiente. Y es que Oliveira queda con Etienne para ir a ver al viejecillo que han atropellado, y cuando descubran que es Morelli no cesarán de visitarlo. El anciano, les confía la llave de su casa, lo que sirve de excusa para que Oliveira y Etienne husmeen en sus escritos.
Pero volvamos al momento en que la ambulancia parte rumbo al hospital, y Horacio todavía no sabe nada del ilustre paciente. Llueve y hace frío.
"Che, pero me voy a empapar, hay que meterse en alguna parte"
En la Salle de Géographie se ofrecen varios eventos, Oliveira se decide por el concierto de piano de una tal Berthe Trépat, uno de los episodios más logrados de la novela.
"Naturalmente me tenía que tocar a mí meterme en este abanico apolillado", rabió Oliveira. "Un viejo debajo de un auto, y ahora Trépat. Y no hablemos del tiempo de ratas que hace afuera, y de mí mismo. Sobre todo no hablemos de mí mismo". Genial.
Y con una soberana hostia propinada por doña Berta al gilipollas de Horacio termina el capítulo 23.
5.- LA MUERTE DE ROCAMADOUR (caps. 24-28)
Gregorovius está en el apartamento de la Maga, "monologando" con ella.
"La Maga lo miró asombrada. Verdaderamente Gregorovius era un estúpido. Salvo Horacio (y a veces...) todos los que la habían deseado se portaban siempre como unos cretinos" [...] "-En el fondo -dijo Gregorovius-, París es una enorme metáfora"
Comienzan a hablar de Pola, la "otra", de quien realmente está enamorado Oliveira (en realidad Oliveira no quiere ni a su puta madre, tan sólo a sí mismo y a su polla, por este orden). La Maga hizo vudú contra Pola clavando en el pecho de un muñequito de cera verde un alfiler. Pola agoniza por un cáncer de mama.
Llega Oliveira. En realidad lleva un buen rato sentado en el rellano, discute con un viejo chiflado que vive arriba y que ha bajado porque insiste en que la Maga tiene muy alto el tocadiscos. Manda a hacer puñetas al viejo y entra al apartamento. Se da cuenta de que el bebé está muerto, pero no dice nada. Le pide a la Maga que suba a calmar al viejito chiflado, que sigue pateando allá arriba.
En esa breve ausencia le comunica a Gregorovius el terrible descubrimiento. En estas que llegan Ronald (y Babs), porque Guy Monod ha intentado suicidarse tomando Gardenal (un barbitúrico); al poco aparece Etienne, explicando que Guy está fuera de peligro.
La Maga prepara café. Todos, menos la Maga, lo saben ya. Y yo creo que también la Maga.
Se lían a hablar de metafísica y otras necedades por el estilo, hasta que la Maga va a darle la medicina al bebé y de sopetón descubre la trágica realidad.
6.- (caps. 29-31) Ha transcurrido una semana desde la muerte de Rocamadour, La Maga se ha ido, y Gregorovius se apalanca el apartamento, que era barato y céntrico. Oliveira pasa a recoger sus cosas y habla con Gregorovius. Hablan de la Maga, obviamente. Nadie conoce su paradero. Quizá se arrojó al Sena.
7.- (caps. 32-34) Horacio lee una carta escrita por la Maga a Rocamadour. Una carta que encoge el corazón. En el fondo intenta justificar que lo deje tanto tiempo solo o en manos de una niñera, porque ella quiere vivir su vida. Y te das cuenta que la Maga, en realidad, deseaba su muerte, en realidad lo mató, porque desoyó todos los consejos para que llevase al niño al hospital.
"¿Por qué le voy a tener lástima? ¿Porque encuentro una carta a su hijo que en realidad es una carta para mí?", dice Horacio.
8.- (cap. 35) Babs, borracha, acusa a Horacio de "inquisidor", y lo pone a parir. Juicio sumarísimo del Club de la Serpiente.
"Entonces Oliveira había dejado de reírse, y como si bruscamente aceptara el juicio (aunque nadie lo estaba juzgando, porque el club no estaba para eso) había tirado el cigarrillo al suelo, aplastándolo con el zapato, y después de un momento, apartando apenas un hombro para evitar la mano de Etienne que se adelantaba indecisa, había hablado en voz muy baja, anunciando irrevocablemente que se borraba del Club, y que el Club, empezando por él y siguiendo con todos los demás, podría irse a la puta que lo parió.
Dont acte."
(cap. 36) Como quiera que Gregorovius le había dicho que tal vez la Maga estaba en la rue Dauphine, tal vez con Pola, hacia allí encamina sus pasos. Entre tanto se para a fumar y a charlar con Emmanuelle, una clocharde de los puentes del Sena, a la que conocían de vista Horacio y la Maga.
Emmanuelle lo convence para que compre un par de litros de vino y se los churren en el fondo de un sucio callejón. Cuando ya se han metido entre pecho y espalda el azumbre de moyate, la clocharde desabrocha la bragueta del pantalón de Oliveira y le comienza a hacer una torpe fellatio. Son pillados in fraganti por un gendarme, y a hostias los suben al furgón policial.
Y aquí termina la primera parte.
****
SEGUNDA PARTE: "DEL LADO DE ACÁ"
9.- (caps. 37-40) Manuel Traveler, y su esposa Talita, son como un alter ego de Oliveira y la Maga (esto anda lleno de alters-egos ¡Oh!). Ellos viven en Buenos Aires.
Por ese bizarro asunto de la mamada, Oliveira es deportado a l'Argentine. Y, no sabemos muy bien por qué, Traveler acude al puerto a esperar la llegada de su antiguo amigo de juventud, máxime cuando a Traveler no le hace la menor gracia que vuelva su amigo, porque sabe lo que va a pasar.
"Oliveira salió del galpón de la aduana llevando una sola y liviana valija, y al reconocer a Traveler, levantó las cejas con aire entre sorprendido y fastidiado"
Luego se van a comer chorizos al puerto.
Han pasado las semanas. Oliveira vive con su antigua novia de juventud, Gekrepten, la eterna Penélope. Paciente y devota lo ha esperado, sin reprocharle nada lo ha acogido al regreso de su odisea, sabiendo que no la ama, sabiendo que le será infiel, sabiendo que está con ella por lástima y por necesidad material (la fragilidad humana, que decía Tomás Crespo en "La Regenta"). Ella trabaja en una tienda de ropa y lo mantiene.
Poco a poco, o quizá desde el primer día, se establece un peligroso triángulo entra Oliveira, Talita y Traveler. Gekrepten lo sabe pero quiere seguir viviendo en su mundo fantasioso, mirando siempre para otro lado.
Viven frente por frente con los Traveler, separados por un estrecho callejón.
"Talita acabó por entender que a Oliveira le daba exactamente lo mismo estar en Buenos Aires que en Bucarest y que en realidad no había vuelto, sino que lo habían traído"
10.- ESCENA DEL TABLÓN (cap. 41)
Oliveira está enderezando clavos doblados que halló en un bote, hace un calor de mil demonios, y Oliveira quiere tomarse un mate, se lo pide a Traveler. Como las ventanas están a la misma altura, éste comenta de lanzarle el paquete de yerba para que lo recoja, pero Oliveira desecha la idea y propone otra mejor: cada uno sacará un tablón por la ventana, y los juntarán para construir un puente, Talita subirá a horcajadas y poco a poco se irá acercando a la ventana de Horacio y le dará el paquete, luego, reculando, volverá con Traveler. Talita accede de mala gana, acaba de salir de la ducha y sólo lleva puesta una bata de baño, así que va arrastrando su coño peludo por el primer tablón, para mayor regocijo de los muchachos que desde el callejón están viendo todo el show, y por supuesto el magnífico mogollón de Talita (más adelante dirá una vecina chismosa:
"con las piernas al aire en ese tablón, mire qué ejemplo para las criaturas, Usted no se habrá dado cuenta, pero desde aquí se le veía propiamente todo, le juro.
-Tenía muchísimos pelos -dijo el más chiquito")
Es una larguísima escena, repleta de erotismo -evidente símil entre los respectivos tablones de los dos hombres como trasunto de sus falos, y una Talita que cabalga desnuda sobre ellos-, y de frases con dobles sentidos, es una lucha entre machos por el amor de la dama. Al final gana Traveler, pues ella no se atreve a cruzar al madero de Oliveira. Entre tanto ha subido Gekrepten y finge que todo es un juego sin importancia.
11.- (caps. 42-47) Traveler convence al director del circo donde trabajan él y Talita para que contrate a Horacio, será una especie de chico para todo. Ahora están ya los tres juntos a todas horas. Están jugando con fuego. Talita se lo dice a Horacio.
"-[...] Lo sé, o mejor lo supe cuando estaba a caballo en el tablón. Ustedes sí lo saben de sobra, yo estoy en el medio como esa parte de la balanza que nunca sé cómo se llama.
-Sos nuestra ninfa Egeria, nuestro puente mediúmnico. Ahora que lo pienso, cuando vos estás presente Manú y yo caemos en una especie de trance. Hasta Gekrepten se percata, y me lo ha dicho empleando precisamente ese vistoso verbo"
(cap. 44) "-Los problemas -dijo Traveler- son como los calentadores Primus, todo está bien hasta que revientan. Yo te diría que en este mundo hay problemas teleológicos. Parece que no existen, como en este momento y lo que ocurre es que el reloj de la bomba marca las doce del día de mañana [...]
-Lo malo -dijo Talita- es que el encargado de darle cuerda al reloj sos vos mismo"
Y más adelante añade Talita:
-¿Pero es que vos creés realmente que él me busca, y que yo...?
-Él no te busca en absoluto -dijo Traveler soltándola-. A Horacio vos le importás un pito. No te ofendas, sé muy bien lo que valés y siempre estaré celoso de todo el mundo cuando te miran o te hablan. Pero aunque Horacio se tirara un lance con vos, incluso en ese caso, aunque me creas loco yo te repetiría que no le importás, y por tanto no tengo que preocuparme. Es otra cosas -dijo Traveler, subiendo la voz-. ¡Es malditamente otra cosa, carajo!
En casa de Traveler juegan a la escoba la Sra. de Gutusso (la vecina chismosa de la escena del tablón), Talita y Gekrepten; D. Crespo Gutusso lee "Marco Antonio y Cleopatra", no cesa de comentar boludeces sobre la obra. Horacio y Traveler se hacen mutuas confidencias. Obviamente terminan hablando de Talita.
(cap. 47) Traveler ha comprado un magnetófono. Talita está sola y va grabando un largo soliloquio.
12.- EL MANICOMIO (caps. 48- ) En el muelle, Horacio cree ver a la Maga, y piensa lo mucho que le recuerda Talita a la Maga, hasta el punto de que está empezando a confundirlas.
Talita (¿o sea la Maga?) se parece a Alida Valli, lo que no está nada mal.
El señor Ferraguto, el dueño del circo, ha vendido su negocio para comprar un manicomio. Oliveira, Talita y Traveler trabajarán en el cotolengo.
(cap. 50) Traspaso ante notario en el propio frenopático. Oliveira se escaquea y se hace amigo de Remorino, un celador. Todos están pendientes del transistor, atentos al golpe de Estado que el coronel Flappa (personaje de ficción) está tramando en Campo de Mayo. Este episodio es trasunto del golpe de Estado real del 29 marzo de 1962, gestado en el acuartelamiento de Campo de Mayo, a las afueras de Buenos Aires, y que acabó con el derrocamiento del presidente Arturo Frondizi y con un baño de sangre.
(cap. 54) El loco nº 8 jugaba constantemente a la rayuela. Es de noche, Talita, que es diplomada en farmacia, se ocupa de la botica del manicomio. Acaba su turno, ve el dibujo de tiza en el suelo y se pone a jugar a la rayuela. Oliveira la mira desde un balcón, y está viendo a la Maga...
La llama, la lleva al tanatorio, donde se guardan las cervezas fresquitas, entonces la besa...
(cap. 55) Talita se lo cuenta a Traveler. Pero no es ninguna sorpresa para él.
"-Yo creo que ocurrió el mismo día que lo fuimos a buscar al puerto -dijo Talita-. No se puede explicar, porque ni siquiera me miró, y entre los dos me echaron como a un perro, con el gato abajo del brazo" (se refiere al famoso "gato calculista", figura principal del circo).
Aunque sólo ha sido un beso, es como si se la hubiera follado. Oliveira hace en su cuarto un parapeto con pinzas de ropa, hilos y palanganas llenas de agua. Sabe que Traveler irá a buscarlo, quiere creer que viene a matarlo, pero la realidad es que le quiere decir que lo quiere como a un hermano enfermo. Y Oliveira, que también los quiere a ambos, no sabe lo que quiere.
Al final Traveler habla con él. Y lo deja solo en su cuarto, diciéndole que lo perdona, que siga con ellos. Traveler baja al patio con Talita. Oliveira los ve desde el balcón.
"Era así, la armonía duraba increíblemente, no había palabras para contestar a la bondad de esos dos ahí abajo, mirándolo y hablándole desde la rayuela, porque Talita estaba parada sin darse cuenta en la casilla tres, y Traveler tenía un pie metido en la seis, de manera que lo único que él podía hacer era mover un poco la mano derecha en un saludo tímido y quedarse mirando a la Maga, a Manú, diciéndose que al fin y al cabo algún encuentro había, aunque no pudiera durar más que ese instante terriblemente dulce en el que lo mejor sin lugar a dudas hubiera sido inclinarse apenas hacia afuera y dejarse ir, paf se acabó."
(final de capítulo 56)
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TERCERA PARTE: "DE OTROS LADOS (capítulos prescindibles)"
Pues eso, capítulos prescindibles...
sábado, 1 de mayo de 1982
viernes, 30 de abril de 1982
jueves, 29 de abril de 1982
miércoles, 28 de abril de 1982
martes, 27 de abril de 1982
lunes, 26 de abril de 1982
domingo, 25 de abril de 1982
sábado, 24 de abril de 1982
viernes, 23 de abril de 1982
jueves, 22 de abril de 1982
miércoles, 21 de abril de 1982
martes, 20 de abril de 1982
lunes, 19 de abril de 1982
domingo, 18 de abril de 1982
sábado, 17 de abril de 1982
viernes, 16 de abril de 1982
jueves, 15 de abril de 1982
miércoles, 14 de abril de 1982
martes, 13 de abril de 1982
lunes, 12 de abril de 1982
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