Sobre el sagrado Templo, el primer lugar de la Tierra que visitó la Madre de Dios, asoma un extraño personaje.
Estoy seguro que es un agente infiltrado de Satanás.
Yo lo saludo, igual que lo hago con la Señora.
Me llevo bien con todo el mundo.
Ellos sabrán la trápala que se llevan.
****